Hoy hay cita más que interesante en la Sala Rocksound. Desde Berlin llegan ZHOD (Zentralheizung of death des todes), banda extremadamente bizarra,con pocas referencias a sus espaldas pero que convencen con tan sólo un par de sus canciones.
Tras un 7" en ALIEN SNATCH! Records, tienen preparado para Abril, y en el mismo sello alemán, un nuevo disco cuyo adelanto podéis escuchar a continuación: brutalidad garajera de alma punk, en sintonía con la psicodelia mesurada de Cosmonauts, la anarquía de The Audacity y la actitud de sus vecinos THE KIDNAPPERS. En "Chatroulette", del 7" Busy Ghost, si cierras los ojos bien fuerte y te sumerges en ese apabullante r'n'r, se te aparecen las imágenes de Jon Spencer y King Khan cogidos de la mano. Podéis escuchar más aquí.
Resumiendo, no nos atrevemos a describir exactamente a qué juegan estos tipos, por lo que el mejor consejo que os podemos dar es que vengáis con nosotros a descubrirlo en el concierto.
Últimamente está caro eso de ver a Aliment en directo, sobretodo por lo agitada que tienen su agenda Univers, banda hermana con la que comparten guitarra-cantante y que precisamente acaba de llegar de una gira por las Américas. Por eso hay que aprovechar cualquier ocasión para ver al trío pero, por si faltaran alicientes, en los últimos conciertos que han ofrecido han ido presentando temas nuevos, que incluirán en un futuro 7" y presumiblemente álbum, y este martes no será menos. Qué más decir, su debut, ese inapelable Holy Slap, aún resuena en nuestras cabezas con tanta fuerza como el primer día.
El evento, organizado por La Castanya, empezará hacia las 9 y el precio es de 6€, así que no hay excusas, hasta tendréis tiempo de coger el último metro sin problemas.
Descubrimos a Furguson hará un año y pico, gracias al Split que sacaron junto a Aliment, editado por La Castanya, aunque para ese entonces ya habían publicado su primer largo, My Friends Are My Culture.
Aun así, no ha sido hasta el pasado mes de Abril cuando (por fin) hemos podido decir bien fuerte que Furguson son uno de los grupos más importantes que tenemos en la actualidad en nuestra tierra. Les han bastado nueve temas, que se hacen muy cortos, para hacerse un hueco definitivo en nuestra biblioteca.
El cuarteto vuelve a apostar por un formato corto (su debut contenía sólo siete piezas) pero contundente al mismo tiempo, juntando una amalgama de registros y estilos difícilmente encajables para cualquier terrícola.
Aunque en algunas ocasiones esos contrastes sean uno de los pocos puntos en contra del álbum, los de Gurb acaban superando el desafío muy dignamente.
Abriendo con "Marks On Our Faces"Furguson desatan el apocalipsis, sin contemplaciones, encogiendo el corazón de cualquiera que se haya atrevido a profanar The Leap Year, este segundo disco nuevamente gestado en Ultramarinos Costa Brava.
Y aquí viene uno de esos giros rompe-tobillos de los que hablábamos, de la desolación que deja el primer corte, al hit primaveral "Heat", donde los sintes juegan un papel fundamental, la voz furiosa suena a liberación y a pura libertad, y los coros adornan el conjunto con enorme brillantez.
El álbum sigue su curso natural, esta vez con toda la coherencia del mundo, hacia "Time Is Wise But Not People", donde destacan unos riffs de guitarra impecables, y siguiendo con la psicotrópica y sintética "The Union", algo así como una mezcla entre rock experimental y rock alternativo de actitud punk, ese que invita a mover la cabeza y a sacudir melenas.
"Psychic Stuff" es, sin duda, el tema perfecto para ponerse en el coche si te dispones a ir hasta el fin del mundo o a tirarte por un precipicio. Basta con cerrar los ojos para imaginarte a ti mismo flotando, dirigiéndote hacia la inmensidad del universo, como si un platillo volante te estuviese atrayendo con su haz de luz en algún clásico de Robert Wise.
Un potente bajo nos introduce en "Some God", pasando del anterior pop rock de estadio, a un punk de sintetizadores, incluyendo por medio un interludio repetitivo de noise 'psycho-espacial'.
"Sattva" supone otro quiebro 'inesperado' (llegados a este punto nada es imposible), suave, tribal y con un riff que transmite calma, que contrasta totalmente con "My Body / Story / Jewish & Sun", con un inicio tremendo al estilo de METZ,después del cual ponen el punto final con "Cap de Creus". Genial batería, increíble bajo y teclados, y demencial guitarra, disfrazándose de Oh Sees catalanes y creando nuestro tema favorito de un LP con el que Furguson dan un gran salto hacia adelante.
Por fin, por fin, por fin tenemos LP de debut de uno de nuestros grupos favoritos, una de nuestras debilidades, sin duda en el top 3 de la movida nacional, Aliment.
Tras 2 años, una Demo, un Split con Furguson y el EP Costa Brava, han dado el salto definitivo con este Holy Slap, editado por La Castanya. Los que los vimos este verano en alguno de sus conciertos, ya pudimos escuchar algunas de las canciones que encontramos aquí, y si en ese momento nos parecieron geniales y en la línea que marcaron en sus anteriores referencias, editado y arreglado, suena simplemente cojonudo.
El comienzo no podría ser más acertado, más brutal, que con 'Seein' Black', punkin crescendo y guitarra 90era que te lleva al éxtasis en los coros del estribillo y que contagia de mala manera, pura fiesta y (apostamos) puro crowd surfing. Enlaza a la perfección con su hermano gemelo de otra madre, 'Like a Vampire', single adelanto del disco. La estructura inversa, con el estribillo al principio, le da mucha más velocidad y gancho a la canción. STOP. La batería es de infarto (no queremos ver la camiseta de Pol después de tocarla en directo), las líneas de bajo de Ignasi son tan increíbles e impredecibles como siempre y Eduard añade la rabia con la voz mientras lo distorsiona todo con la guitarra. Sin duda forman el inicio más adrenalínico que he escuchado en mucho tiempo.
Aliment no ponen el freno aún y mantienen el ritmo con 'Till Night Ends', algo rara, con unos punteos muy indie-rock, difícil de digerir en las primeras escuchas, pero que fácilmente puede acabar siendo una de tus favoritas, y 'Holy Slap', que da título al álbum, proporciona la mayor dosis de diversión a la vez que refleja el espíritu adolescente y te invita a balancearte como un marinero gritando los coros a pleno pulmón.
'El Del Perro' es un oasis en medio del disco, un espejismo, una balada cautivadora que a algunos les podría cortar el rollo pero que a otros nos sirve para coger fuerzas. Destaca el bajo, que marca la melodía junto con las voces de Eduard y Pol. Definitivamente tras la calma se esconde uno de los mejores temas del disco.
Pasado ya el ecuador, nos encontramos con 'Bad Blood', la más larga de las 11 composiciones (aunque ninguna llega a los 3 minutos, no les hace falta), garage-punk marca de la casa, cambios de ritmo flipantes, y para acabar un torbellino de los de piel de gallina, y 'Second Round', con el mismo estilo, una estructura parecida, especial para fiestas a las 6 de la mañana. En medio, el comienzo quizás más raro que les hemos escuchado a los de Girona, 'True Story', con unos bajos que recuerdan a los primeros Placebo, aunque rápidamente el sonido se vuelve totalmente reconocible. Los punteos de mitad de tema, geniales, dan paso a un final con unos juegos vocales y un punto épico que lo convierten en uno de nuestros favoritos del LP, junto con 'Friends from the Block'. Tiene algo de místico, juega constantemente con las tonalidades y al final ya no sabes si reírte o quitarte la gorra, lanzarla al suelo y quedarte llorando en un rincón.
Las dos últimas balas son potentísimas: 'Pet Love', canción llena de luz y alegría, que han confesado no saber tocar, con un comienzo guitarrero muy a lo Strokes y un paso más allá hacia el sonido nashviliano de PUJOL y compañía (gran culpa la tiene la voz cabreada de Eduard), y 'Remote Control', para muchos la maravilla del disco, el tema más garage, más Mujeres, algo Thee Oh Sees sumándole unos parones muy bestias, y un momento de desgañite, fuera los instrumentos, al estilo de l'Hereu Escampa.
No hay tema flojo, tema que pasar o que no valga la pena. Holy Slap es redondo y completo, uno de los discos del año.
Aliment son ese grupo que vimos tocar por primera vez en la Sidecar, y al que compramos con desgana su Demo, que hoy guardamos como un pequeño tesoro esperando que en unos añitos la podamos vender por eBay a algún coleccionista americano, porque es oro, el comienzo de lo que promete ser algo grande para el punk autóctono.
Así es. Aliment, grupo por el cual tenemos especial debilidad, da un paso más, una zancada larga más bien, hacia el punk, sin descuidar sus toques característicos, como las impredecibles líneas de bajo de Ignasi o los gritos distorsionados de Eduard y Pol.
De momento ya tenemos un adelanto (y la portada) del LP de debut, Holy Slap, que sale el 9 de Octubre bajo el sello La Castanya.
El tema lleva por título Like a Vampire, una descarga directa al cerebro de punk garagero, disfrutadlo:
Además, la presentación del disco consistirá en una gira por toda la península junto a la banda de garage-punk de Brooklyn, Obits, cuyas fechas se anunciarán en breves.
Recordad que este domingo 19 estarán tocando en el Festigàbal, en la Plaça Rovira de Barcelona, donde podremos escuchar algunos de estos nuevos temas.